martes, 13 de abril de 2010

PLAGAS FORESTALES


Trampa de feromonas para control de procesionaria.





orugas en procesión antes de enterrarse.


Orugas.



Crisálidas de procesionaria

Procesionaria del Pino (Thaumetopoea pityocampa): Este Lepidoptero es sin lugar a dudas una de las mayores amenazas que las masas forestales de coníferas sufren, los daños vienen ocasionados por las orugas que son defoliadores, llegando en algunos casos a unos niveles de defoliación realmente importantes sobre todo en pinos de la especie Pinus nigra o pino Laricio donde causan importantes daños, menos importantes estos daños en otras coníferas como los Cedros, las orugas se alimentan de las acículas de estos, cuando la defoliación es muy severa lógicamente el pino puede llegar a morir.
El ciclo biológico de esta especie empieza cuando el imago (mariposa nocturna), realiza la puesta por el mes de Julio, los huevos se alinean sobre varias acículas del pino, quedando fijados con escamas del abdomen de la hembra, dando un aspecto de canutillo pardo rojizo, el numero de huevos varía de 48 a 336, tardan en eclosionar 30-35 días.
Tras este periodo nacen las orugas que forman los característicos bolsones en las ramas, causando los daños antes mencionados,su cuerpo está recubierto de unos pelillos urticantes, que le defienden de predadores, tras varios estadíos de crecimiento las orugas descienden del árbol hasta el suelo donde forman las filas en forma de procesión de aquí el nombre vulgar de la especie, una vez en tierra empiezan a moverse de forma convulsiva con objeto de enterrarse a veces varios metros de profundidad para convertirse en crisálida, en este estadío permanecerán hasta el mes de junio-julio, a partir de aquí emergen las mariposas, que viven solo unos días los necesários para aparearse y realizar la puesta.El ciclo biológico descrito varía dependiendo si es zona fría o zona cálida, atrasándose o adelantándose el mismo.
Los tratamientos de esta plaga actualmente se limitan al control mediante trampas de feromonas, donde se capturan a los machos de la especie, hace algunos años se trataban las masas forestales mediante la lucha química con inibidores de crecimiento no selectivos que afectaban a otras especies y resultaban muy costosos.
Nuestro municipio no alberga ni mucho menos masas importantes de coníferas, los pinos sobre todo piñonero y cedros son usados con frecuencia como árboles ornamentales en huertas y casas de campo, de aparecer la procesionaria se recomienda algo tan simple como podar las ramas del árbol que albergan los bolsones y eliminarlas mediante quema.

Fotos: Centro de capacitación forestal Vadillo- Castril y Mariano Martínez Aguilar.

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