Perdiz roja (Alectoris rufa); Ya por el mes de febrero los campos empiezan a barruntar cambios en el reloj biológico de las especies, obviamente las aves son las que con sus cantos mas se hacen notar, tal vez entre todos estos cantos resalte el de nuestra patirroja, el cacacareo de la perdiz macho inunda el ambiente, orgulloso marca su territorio desafiante, ya en estas fechas están las perdices emparejadas preparadas para continuar con la perpetuidad de la especie una vez que el cazador ha guardado su escopeta, en el mes de junio veremos las primeras perdices acompañadas por una docena de pollitos que deberán pasar por mil peligros hasta convertirse en una esbelta perdiz adulta. Desde el monte hasta el olivar esta gallinacea ocupa todo nuestro entorno municipal convirtiéndose así en uno de los símbolos del ecosistema mediterráneo.
Fotos: Mariano Martínez Aguilar (Monte público Burguillos).
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